Preocupada la OMS por Dengue y Chikungunya
durante este verano

La Organización mundial de la salud advierte que el cambio climático está empeorando la propagación de estas enfermedades propagadas por mosquitos.
Las altas temperaturas favorecen su ciclo de vida y ya en América del Sur tuvieron récord de casos y se espera que lo mismo ocurra en el Caribe y Sur de Estados Unidos.
Paraguay, por ejemplo, ya está sufriendo lo que los expertos llaman uno de los peores brotes de chikungunya en toda Sudamérica. Han muerto ya 115 personas este año.
Los datos muestran que los casos semanales de chikungunya están rompiendo récords este año. El dengue en abril reportado plantea un 36% más que el promedio de los últimos cinco años.

Por qué es aconsejable protegerse del sol independientemente de tu color de piel y aunque haya pasado el verano

Si solo tienes unos segundos, lee estas líneas:

  • La exposición a los rayos del sol durante todo el año puede aumentar el riesgo de padecer cáncer de piel.
  • Permanecer a la sombra, ponerse protector solar y usar ropa tupida de manga larga sirve para protegerse de la radiación ultravioleta.
  • Para detectar temprano un cáncer de piel, es aconsejable examinarse la piel de forma habitual (por ejemplo, una vez al mes) y estar pendiente de cualquier cambio en los lunares, pecas y manchas.

Aunque pasar tiempo al aire libre es una manera excelente de estar físicamente activo y obtener vitamina D, protegerse del sol es muy importante para prevenir la aparición de un cáncer de piel, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Les contamos por qué es importante utilizar protector solar todo el año, independientemente del color de piel que se tenga, y qué otros trucos sirven para reducir la exposición a los rayos del sol.

La exposición a los rayos del sol puede aumentar el riesgo de padecer cáncer de piel

El cáncer de piel es el tipo de cáncer más común, según la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés). Entre las posibles causas de esta enfermedad, está la exposición excesiva a los rayos ultravioleta (UV) que proceden del sol.

Advertisements

En qué fijarse al elegir un protector solar

A la hora de elegir un protector solar, la ACS recomienda elegir aquellos con protección de “amplio espectro”. Los productos con esta etiqueta brindan protección tanto contra rayos ultravioleta tipo A (UVA) como los del tipo B (UVB), que contribuyen al cáncer de piel y a su envejecimiento prematuro.

La organización sugiere, además, escoger productos con un factor de protección solar (o SPF, por sus siglas en inglés) de, por lo menos, 30. Cuanto más elevado sea este número, mayor es la protección. Según la ACS, los protectores con SPF 15 filtran aproximadamente el 93% de los rayos UVB. Los que tienen SPF 30, alrededor del 97%; los de SPF 50, alrededor del 98%; y los de SPF 100, aproximadamente el 99%.

Antes de ponerse el protector solar, los CDC aconsejan verificar su fecha de caducidad. Estos productos suelen tener, como máximo, “una vida útil de 3 años”, que puede ser más corta si han estado expuestos a altas temperaturas.

Además, la organización insiste en que ningún protector solar es a prueba de agua ni de sudor. “Si la etiqueta frontal de un producto afirma que este es resistente al agua, la misma debe especificar si dura por 40 minutos u 80 minutos al nadar o transpirar”, señala. Los CDC aconsejan volverse a poner crema después de permanecer al sol durante más de 2 horas y tras nadar, sudar o secarse con una toalla.

Por qué no es aconsejable aplicar protector solar a los menores de 6 meses

Pese a que la piel de los bebés es especialmente vulnerable a quemaduras graves, la FDA y la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) desaconsejan aplicar protector solar a los menores de 6 meses. El motivo es que “corren mayor riesgo que los adultos de sufrir los efectos secundarios de los protectores solares, como un sarpullido”.

Advertisements

La FDA recomienda mantener a los bebés alejados del sol entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde y a la sombra siempre que sea posible. También vestirlos con ropa ligera, como pantalones largos y camisas con mangas. “Si sostiene la tela contra su mano y es lo suficientemente transparente como para ver a través de ella, probablemente no ofrezca suficiente protección”, advierte.

De ropa tupida y oscura a un sombrero: cómo vestirse para protegerse del sol

La vestimenta también sirve para protegerse del sol. Siempre que sea posible, los CDC recomiendan ponerse camisas de manga larga y faldas y pantalones largos. “Si usar este tipo de ropa no es práctico, trate de usar una camiseta o un pareo de playa”, señala.

Las prendas de tela tupida ofrecen una mejor protección. Así lo indica el organismo, que destaca que una camiseta mojada ofrece mucha menos protección que una seca y que los colores más oscuros son mejores que los claros.

Además, aconseja usar un sombrero con un ala alrededor que dé sombra a la cara, las orejas y la nuca, y evitar los sombreros de paja con agujeros que dejan pasar la luz del sol. Si se usa una gorra, es recomendable protegerse las orejas y la nuca con alguna tela, protector solar o estando a la sombra. Los lentes de sol, además de proteger de los rayos ultravioleta los ojos y la piel de alrededor, “reducen el riesgo de cataratas”.

Examinarse la piel de forma habitual a veces ayuda a detectar un cáncer de piel

Para detectar temprano un cáncer de piel, “no es necesario hacer radiografías ni análisis de sangre, simplemente se requiere de sus ojos y de un espejo”, afirma la ACS. El organismo aconseja examinarse la piel de forma habitual (por ejemplo, una vez al mes).

Advertisements

Para ello, sugiere ponerse frente a un espejo de cuerpo entero en una habitación en la que haya mucha luz y observar todo el cuerpo: de la cara al cuello, pasando por el pecho (levantando los senos), el abdomen, la espalda, los brazos o las piernas.

Un espejo de mano puede ser de ayuda para ver algunas zonas (como la parte trasera de los muslos). “Su pareja o un amigo o familiar de confianza pueden ayudarle con estos exámenes, especialmente cuando se trate de áreas difíciles de ver, tales como la espalda o el cuero cabelludo”, señala.

El objetivo es conocer el patrón de los lunares, las imperfecciones, las pecas y otras marcas en la piel para poder detectar cualquier cambio durante la próxima evaluación. “Si examina su piel periódicamente, sabrá lo que es normal en ella”, señala la ACS.

Lunares que cambian de forma y otras señales que ayudan a detectar un cáncer de piel

No todos los cánceres de piel tienen el mismo aspecto. Como explica la ACS, pueden aparecer en muchas formas y tamaños y, a veces, incluso pueden parecerse a otras afecciones dermatológicas.

Aun así, para detectar un cáncer de piel, la organización aconseja prestar atención a algunas señales. Por ejemplo, al crecimiento o la expansión de una mancha o una protuberancia (un hinchazón) en la piel; una úlcera que sangra; una mancha roja que es áspera o escamosa y que puede sangrar o formar costra; algo parecido a una verruga; y un lunar que sea nuevo, cambie de tamaño, forma o color o tenga bordes irregulares o áreas de diferentes colores.

Si al observar tu piel (durante un autoexamen o en cualquier otro momento) notas cualquier cambio que te preocupe, lo más aconsejable es que lo revise un médico.

Se encuentran microplásticos en la leche materna humana

Por primera vez se han detectado microplásticos en la leche materna humana, según un nuevo estudio publicado en Polymers.

Aunque se necesitan más estudios, los investigadores dijeron estar preocupados por los posibles efectos en la salud de los lactantes.

“La prueba de microplásticos presentes en la leche materna aumenta nuestra gran preocupación por la población extremadamente vulnerable de los lactantes”, dijo a The Guardian la Dra. Valentina Notarstefano, una de las autoras del estudio en la Universita Politecnica della Marche, en Ancona, Italia.

“Será crucial evaluar las formas de reducir la exposición a estos contaminantes durante el embarazo y la lactancia”, observó. “Pero hay que subrayar que las ventajas de la lactancia son mucho mayores que los inconvenientes causados por la presencia de microplásticos contaminantes en la leche materna”.

Advertisements

El equipo de investigación analizó muestras de leche materna de 34 madres sanas, tomadas una

El equipo de investigación analizó muestras de leche materna de 34 madres sanas, tomadas una semana después del parto en Roma. Se detectaron microplásticos en 26 de las muestras, es decir, en 76%.

después del parto en Roma. Se detectaron microplásticos en 26 de las muestras, es decir, en 76%.

Los investigadores registraron la cantidad de alimentos y bebidas que consumían las madres que utilizaban envases de plástico, así como su uso de productos de higiene personal con plástico, pero no encontraron ninguna relación con la presencia de microplásticos en la leche materna, lo que indica que la presencia generalizada de microplásticos en el medio ambiente “hace inevitable la exposición humana”, escribieron los autores del estudio.

El equipo de investigación también encontró microplásticos en placentas humanas en 2020, informó The Guardian. Otros estudios han revelado microplásticos en la sangre humana, en la leche de vaca y en los biberones de polipropileno que suelen utilizarse para alimentar a los lactantes. Aunque estudios anteriores han observado los efectos tóxicos de los microplásticos en líneas celulares humanas, animales de laboratorio y fauna marina, aún se desconocen los efectos en los seres humanos vivos.

En el último estudio, los investigadores descubrieron que los microplásticos estaban formados por polietileno, polipropileno y cloruro de polivinilo, que se encuentran en los envases de plástico. El equipo no pudo analizar las partículas de menos de 2 micras, pero afirmó que es probable que en la leche materna hubiera partículas de plástico aún más pequeñas.

Gorra tipo trucker

El equipo de investigación no pudo identificar los factores de riesgo relacionados con los microplásticos en la leche materna, pero la Dra. Notarstefano aconsejó a las mujeres embarazadas que prestaran atención a los alimentos y bebidas que consumen en envases de plástico, a la ropa fabricada con tejidos sintéticos y a los cosméticos que contienen microplásticos.

“Estudios como el nuestro no deben reducir la lactancia materna de los niños, sino más bien sensibilizar a la opinión pública para presionar a los políticos, a fin de que promuevan leyes que reduzcan la contaminación”, finalizó.

¿Cómo afecta a la salud las emisiones del volcán de La Palma?

El pasado domingo 19 de septiembre, entró en erupción el volcán de la isla de La Palma en las islas Canarias, cubriendo de lava centenares de hectáreas del archipiélago y provocando la evacuación de la población. Aunque entre los expertos existe una preocupación generalizada por las consecuencias de la liberación de los contaminantes, todavía resulta difícil concluir los efectos a corto y largo plazo que las emisiones tendrán para la salud.

Advertisements

“La niebla volcánica puede provocar complicaciones a nivel ocular y dermatológicos, pero los efectos más nocivos son los respiratorios”, explica a Univadis España la Dra. Olga Mediano, coordinadora la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y miembro del Grupo 35 del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), dependiente del Instituto de Salud Carlos III.

“No existe duda de que la contaminación atmosférica tiene efectos nocivos sobre la salud en general, y sobre todo a nivel cardiovascular. Numerosos artículos científicos han descrito los mecanismos deletéreos de los contaminantes, sobre todo relacionados con el estrés oxidativo y fenómenos de vasoconstricción y protrombóticos”, afirma el portavoz de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y la Fundación Española del Corazón, el Dr. Jordi Bañeras.

Las emisiones del volcán se constituyen de vapor de agua, sulfuro de hidrógeno, cloruro de hidrógeno, dióxido de carbono y dióxido de azufre. Este último es un gas irritante y tóxico que afecta sobre todo a las mucosidades y los pulmones. Y que, como advierten desde el SEPAR, inhalado en altas concentraciones puede resultar muy dañino y provocar irritaciones en las mucosas, lagrimeo, inflamaciones pulmonares o incluso bronquitis, alveolitis y neumonitis. “De momento las mediciones de gases que reflejan los últimos informes señalan que no se están detectando niveles preocupantes de las emisiones”, explica la neumóloga, que, como recuerda, además de los gases, la erupción expulsa piroclastos, fragmentos de magma en suspensión o cenizas volcánicas, “lo que sí resultaría una amenaza para la salud”.

“El sistema respiratorio está preparado para acabar con todo cuerpo extraño. Las partículas de mayor tamaño las eliminamos con nuestros mecanismos naturales de defensa: la tos, la mucosidad, los estornudos”, expone la experta, para quien “el problema son las partículas pequeñas, de menos de 2 milímetros, que llegan a la vía respiratoria inferior, llegan a los bronquios. Se produce el cierre del bronquio provocando broncoespasmos y dando lugar a síntomas como sensación de falta de aire, ruidos respiratorios y tos”, agrega.

Advertisements

Los pacientes con asma, pacientes con COPD, adultos mayores y niños conforman el colectivo más vulnerable ante la ceniza volcánica

Como explica la neumóloga, “con una adecuada protección las emisiones del volcán no tienen por qué causar problemas en la población general. Pero existen grupos vulnerables, como los pacientes con asma que, al inhalar el dióxido de azufre y más partículas aumentan la posibilidad de desarrollar una crisis o un broncoespasmo”, destaca la Dra. Mediano. Los adultos mayores y los niños también constituyen otro grupo de riesgo. “En otras ocasiones se ha visto que la exposición de los más pequeños tiene consecuencias tales como la broncoconstricción y otros problemas respiratorios, así como los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas o con enfermedad pulmonar obstructiva crónica pueden sufrir reagudizaciones y llegar al ingreso hospitalario. Por eso este tipo de pacientes deben protegerse mucho más”, aclara la experta.

Aunque los efectos a corto plazo en el tracto respiratorio son previsibles, ahora mismo resulta difícil valorar los riesgos reales para la salud en el tiempo. “Hay muy pocos estudios sobre los efectos de las emisiones a largo plazo”, advierte la coordinadora del SEPAR. Si bien se han realizado ensayos in vitrode los efectos de la ceniza en la salud y su relación con el desarrollo de fibrosis pulmonar, según la Dra. Mediano “lamentablemente no existen suficientes estudios que evidencien la alteración de la función pulmonar a largo plazo”.

Entre los efectos más perjudiciales en la salud respiratoria ocasionados por la precipitación de ceniza volcánica a lo largo del tiempo destaca la silicosis, causada por inhalar polvo de sílice. “Esta enfermedad pulmonar, frecuente en la profesión minera por su exposición, es un tipo de fibrosis pulmonar que produce enfermedad pulmonar obstructiva crónica y que aumenta el riesgo de padecer cáncer”, explica la neumóloga a Univadis España. No obstante, “en el caso del volcán de La Palma, la intensidad de exposición al sílice es relativamente baja y, por lo tanto, resulta un problema que puedan desarrollar a largo plazo los habitantes”, aclara.

Como señala el cardiólogo, “a nivel científico, escasos estudios observacionales han recogido la experiencia de erupciones como la del volcán Kilauea en Hawái, Guagua Pichincha en Ecuador y el Eyjafjalla en Islandia, focalizándose en la emisión de dióxido de azufre volcánico”. Aunque la preocupación por los efectos a largo plazo de la exposición crónica a estos contaminantes está latente, “no disponemos de suficientes datos para que se pueda estudiar la evidencia de estos efectos sobre la salud cardiovascular”. Para el Dr. Bañeras, “aunque sí parece que esta exposición aguda pueda incrementar las visitas a urgencias por patologías respiratorias, tampoco se pueden sacar conclusiones a corto plazo del efecto de la exposición a emisiones volcánicas sobre la salud cardiovascular. De momento no disponemos de datos que nos puedan llevar a pensar que existe una asociación entre la contaminación generada por erupciones volcánicas y las enfermedades cardiovasculares”, afirma el portavoz de SEC. “Además, existen varios factores de confusión como el estrés que se vive en estas situaciones, que si podría estar relacionado con la génesis y reagudización de estas enfermedades”, añade.

Advertisements

Medidas de protección contra la ceniza volcánica

A más de diez días de la erupción del volcán la lava se ha expandido hasta alcanzar el mar y el Cabildo de La Palma mantiene sus recomendaciones a la población: protegerse la nariz y la boca, no realizar actividades físicas al aire libre, tapar todos los recipientes de agua y no dejar alimentos a la intemperie con el objetivo de evitar su contaminación, cerrar las puertas y las ventanas de las viviendas y sellar con trapos húmedos las ventanillas. Los expertos también insisten en la importancia de beber abundantes líquidos y mantenerse hidratados. “Nuestro mecanismo de defensa es el moco que se produce dentro de los bronquios y es el que elimina toda sustancia extraña. Si la mucosa está bien hidratada se irrita menos y, por lo tanto, no se cierra tanto. ¡Cuanto más moco produzcamos más capacidad de eliminar los cuerpos extraños! Por eso para que en el pulmón se produzca una mejor limpieza es muy importante que estemos bien hidratados”, expone la coordinadora del SEPAR.

“Aunque las mascarillas FFP2 no son específicas contra los gases emitidos por el volcán, y lo ideal sería que los ciudadanos llevaran unas específicas para el polvo, el equipo con el que contamos para la COVID-19 nos protege bastante bien contra la ceniza y el polvo”, dice la Dra. Mediano. “Normalmente se recomienda usar una tela que cubra tanto la nariz como la boca, si es húmeda mejor. Pero ahora contamos con la ventaja de que todo el mundo está provisto de mascarillas y esto ¡va a ser un factor aliado para reducir el impacto en la salud!”, asegura.

Advertisements

Las emisiones volcánicas también son una fuente contaminación atmosférica 

La activación o reactivación de un volcán resulta uno de los fenómenos naturales más temidos e imprevisibles en la salud pública y en el medio ambiente. Aunque sea de origen natural, este tipo de emisiones suponen también una fuente de contaminación atmosférica, la cual provoca la muerte de millones de personas cada año, representando el mayor factor de riesgo de mortalidad prematura en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 9 de cada 10 personas respiran aire que excede los niveles de contaminantes, causados sobre todo, por los combustibles fósiles.

“Los riesgos por exposición a la contaminación ambiental producida por un volcán son muy distintos a los industriales, pero conocerlos puede ayudar a crear conciencia sobre la problemática”, afirma la Dra. Mediano, que no se muestra muy optimista ante un cambio en los hábitos de los ciudadanos para mejorar la calidad del aire que respiramos. “La gente tendría que cambiar el modo de vida y no parecemos estar muy dispuestos a hacerlo. Solo hay que observar lo que ha pasado con el coronavirus. Veíamos cómo se moría la gente y aun así nos costaba mucho cambiar nuestro estilo de vida. ¿Vamos a ser capaces de hacer cambios tan relevantes en nuestra vida si los efectos negativos de la contaminación son mucho menos tangibles que los de esta pandemia?”, concluye.

Este contenido fue originalmente publicado en Univadis, parte de la Red Profesional de Medscape.

Precaución: llega a Puerto Rico una nube de dióxido de azufre desde el volcán de la isla española La Palma

jLa extensa nube de polvo del Sahara que afectará Puerto Rico al menos hasta el martes parece ser más intensa de lo usual, luego que imágenes satelitales mostraran que contiene partículas de dióxido de azufre (SO2) que provienen del volcán Cumbre Vieja, el cual hizo explosión a mediados de septiembre en la isla española La Palma, parte de Islas Canarias.

Advertisements

El Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan indicó más temprano a El Nuevo Día que, aunque sí se ha observado la presencia de SO2 y ceniza volcánica en combinación con el polvo del Sahara sobre la isla, este último es el que predomina en la región y es lo que se observa en imágenes satelitales del Centro Nacional de Huracanes(NHC, en inglés) en Miami.

“Impactará (a Puerto Rico) como todo lo que contamina el aire, especialmente las personas que son bien propensas a problemas respiratorios”, comentó la meteoróloga Rosimar Vázquez, del SNM en San Juan.

Imágenes satelitales de Copernicus mostraron en tiempo real la llegada de una amplia nube de SO2 a Puerto Rico a eso de la medianoche de hoy, domingo. La zona más intensa de la nube entró a la isla pasadas las 4:00 de la madrugada.

“Los pronósticos del Programa de Observación de la Tierra sugieren una mejoría de la presencia de este particulado en Puerto Rico para la mañana del lunes. Se anticipa que la nube pudiera llegar a República Dominicana en la noche del domingo”, compartió la Sociedad de Astronomía del Caribe (SAC).

La meteoróloga Deborah Martorell señaló que lo que se observa al momento en el aire es polvo del Sahara, aunque no descartó que haya una combinación con el dióxido de azufre proveniente de La Palma.

Advertisements

“Desde la semana pasada, lo que hemos visto en la imagen de aerosol de NASA es que llega polvo del Sahara. Claro está, tenemos que esperar el análisis de la laminilla del Departamento de Microbiología de la Universidad de Puerto Rico, porque en la laminilla vamos a ver qué es lo que tenemos suspendido en el aire. Si hay rastro de dióxido de azufre o ceniza volcánica, eso lo va a reflejar el muestreo del aire”, precisó.

El portal Windy.com muestra que la parte más intensa de la nube saldrá de Puerto Rico tarde en la noche del domingo, aunque remanentes continuarán en la región hasta el miércoles.

“El Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) recomienda que las personas de avanzada edad, niños y personas con problemas respiratorios deben reducir actividades que requieran esfuerzo prolongado o intenso al aire libre”, destacó la agencia en declaraciones escritas.

Según el portal AirNow, la calidad del aire para Puerto Rico está “moderada”, por lo que recomienda a la ciudadanía con problemas respiratorios reducir la exposición al aire libre, realizar actividades menos extenuantes como caminar en lugar de correr, y optar por realizar actividades en el interior.

En tanto, el portal del DRNA indica que la calidad del aire para la zona metropolitana está “insalubre a grupos sensitivos”, lo que significa que “grupos sensitivos podrían sentir algún efecto en su salud. Estos son niños ancianos, personas con padecimientos respiratorios y cardíacos. El público en general no necesariamente se verá afectado”.

Advertisements

La lava de la erupción, que comenzó el pasado 19 de septiembre, ha destruido casi 600 edificios y 13 millas de carreteras en la isla La Palma, y cubre 637 acres, en su mayoría campos de cultivo, según la agencia de monitoreo por satélite de la Unión Europea. El volcán ha arrojado más de 1,600 millones de pies cúbicos de roca fundida.

El dióxido de azufre es definido por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico como “un gas que se origina sobre todo durante la combustión de carburantes fósiles que contienen azufre (petróleo, combustibles sólidos)”. El principal emisor de SO2 es el sector industrial.

El SO2, el cual es incoloro, causar irritación e inflamación del sistema respiratorio, afecciones e insuficiencias pulmonares, alteración del metabolismo de las proteínas, dolor de cabeza o ansiedad. También puede ocasionar daños en la biodiversidad, los suelos y los ecosistemas acuáticos y forestales.

¿Cómo afecta el cambio climático al cáncer?

La temperatura global promedio ha aumentado cada década desde 1901, con el año más cálido registrado en 2016 y el segundo más cálido en 2020. Sin embargo, desde la década de 1970 se ha calentado más rápido, señalan los autores, Dr. Robert A. Hiatt, Ph. D., y Naomi Beyeler, maestra en salud pública, en una publicación en Lancet Oncology en noviembre de 2020, una entrevista en ASCO Post en 2021 y una correspondencia, sobre el efecto del cambio climático y el cáncer.

Advertisements

Efectos del cambio climático sobre el cáncer 

Los principales mecanismos a través de los cuales es probable que el cambio climático afecte el control del cáncer son: vías causales que involucran la contaminación del aire, exposición a la radiación ultravioleta, interrupciones en el suministro de alimentos y agua, exposición a sustancias tóxicas industriales y posibles causas infecciosas del cáncer.

Estos efectos se asocian principalmente con cánceres de pulmón y del tracto respiratorio superior, piel, tracto gastrointestinal e hígado.

Más allá de estos factores causales enunciados, otro efecto es la interrupción en la infraestructura de los sistemas de atención médica para el control del cáncer, que podrían afectar a todos los cánceres.

Advertisements

Efecto directo: interrupciones en la atención médica

Los exámenes preventivos de cáncer de mama, de cuello uterino y de colon se desplomaron entre 86% y 94% durante los primeros cuatro meses de 2020, debido a la pandemia de COVID-19. Como resultado del retraso en los exámenes de detección y atención, el National Cancer Institute predice que 10.000 decesos adicionales de cáncer de mama y colorrectal ocurrirán durante la próxima década.

Además, su revisión encontró que las interrupciones en las operaciones hospitalarias causadas por desastres climáticos, como los huracanes, pueden resultar en retrasos sustanciales en el tratamiento del cáncer.Se necesita preparar a sistemas de salud resistentes al clima para garantizar la continuidad de la atención.

Advertisements

Fenómenos meteorológicos: afectan el tratamiento y la sobrevida del cáncer

Uno de los efectos más destacados de la investigación es que, a pesar de los avances médicos, se encontraron muchos desafíos para lidiar con COVID-19.

Además, se observaron importantes interrupciones en las operaciones hospitalarias y retrasos en el tratamiento del cáncer debido a la infraestructura hospitalaria dañada durante varios huracanes en las últimas 2 décadas, incluido el huracán Katrina en 2005. En Nueva Orleans las áreas circundantes redujeron el acceso a la atención del cáncer durante años después del desastre y un estudio encontró que la sobrevida a 10 años del cáncer de mama fue menor para las personas afectadas por el huracán que para las que no fueron afectadas por Katrina.

Además, una revisión sistemática de los desastres naturales y el cáncer encontró evidencia de una mayor mortalidad por cáncer después de estos desastres que antes de estos eventos climáticos.

Advertisements

Hacia una medicina sostenible

Los estudios han demostrado que los mayores contribuyentes a la huella de carbono en el sistema de salud de Estados Unidos son los sectores de la industria farmacéutica y hospitalaria, por lo que la optimización de la ventilación del quirófano en función de la ocupación y la demanda y el uso de máquinas de tomografía computarizada y resonancia magnética más eficientes en energía puede ayudar a reducir emisiones de gases de efecto invernadero.

Pensando en cómo utilizar la energía de una forma más sostenible en todo el sistema sanitario, por ejemplo:

  1. Evitar la duplicación en el seguimiento de la atención del cáncer para múltiples subespecialidades de oncología y atención primaria.
  2. Promulgar políticas para aumentar el transporte público y alentar a caminar o andar en bicicleta a los centros de cáncer.
  3. Usar la telemedicina para citas relacionadas con el cáncer cuando sea posible puede ayudar a reducir el impacto ambiental del cambio climático.

Este análisis y recomendaciones, realizado por el Dr. Hiatt y Beyeler, da un enfoque más tangible sobre las acciones que debemos de tomar para hacer nuestra práctica más sostenible.

Los profesionales de la salud pública y los líderes políticos debemos pensar en cómo anticipar las crisis ambientales causadas por el cambio climático que es probable que ocurran y qué políticas podrían implementarse para minimizar los riesgos de la atención médica. Lo hemos visto, con la última pandemia mundial, aún en curso, los incendios forestales en todo el mundo. Lo hemos visto en el último huracán y el deshielo del Ártico. Habrá retos futuros que tendremos que afrontar. Se necesita preparar a sistemas de salud resistentes al clima para garantizar la continuidad de la atención durante los eventos relacionados con el clima.

Siga al Dr. Henry Gomez Moreno en LinkedIn.